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EL ABC para el Crecimiento Agrícola

Para muchos productores estas últimas temporadas no han sido buenas, sus principales preocupaciones han sido mantenerse en el negocio y hacer gestión financiera. Pero esta temporada está siendo distinta pues nos está mostrando un futuro con mejores resultados por lo que es un buen momento para volver a pensar en el crecimiento. Para ayudar a esa planificación es que les proponemos tener en cuenta los siguientes aspectos;

Buscar la innovación de su modelo de negocio de forma de agregar valor a sus productos. Nuevas formar de comercializar, variedades distintas, procesamiento industrial o certificaciones exigentes que permitan diferenciarse y obtener precios más altos en el mercado.

Realizar un análisis financiero exhaustivo para comprender la situación actual de la empresa. Evalúar los ingresos, costos, márgenes de beneficio y flujos de efectivo. Es fundamental identificar las fuentes y los usos específicos de los fondos para comprender cómo se ha utilizado el endeudamiento en el pasado.

En caso de ser necesario, negociar con los acreedores para reestructurar la deuda. Es prioritario buscar condiciones de pago acordes al ciclo del negocio, tasas de interés reducidas o extensiones en los plazos de pago con el objetivo de sustentar el crecimiento de forma sostenible en el tiempo. El endeudamiento en empresas agrícolas que exportan fruta fresca es un desafío permanente por la cantidad de variables incontrolables presentes, y su gestión efectiva es crucial para garantizar la estabilidad y el crecimiento sostenible de la empresa.

Diversificar los mercados de exportación para reducir la dependencia de un solo mercado. Esto puede ayudar a minimizar el impacto de posibles fluctuaciones en la demanda o condiciones económicas en un mercado específico.

Al igual que la diversificación de mercados, el mantener el control y la supervisión directa de todos los aspectos relevantes del proceso de comercialización de la fruta es prioritario al momento de planificar un crecimiento sostenible a través de los años.

Implementar estrategias de gestión de riesgos para protegerte contra imprevistos; fluctuaciones en los precios de las frutas, desastres naturales o cambios en las regulaciones internacionales.

Optimizar los procesos operativos para mejorar la eficiencia y reducir costos. Esto puede incluir la adopción de tecnologías agrícolas avanzadas, mejoras en la cadena de suministro y la gestión eficiente de recursos.

Establecer un sistema de monitoreo constante para evaluar y ajustar las estrategias de las variables claves del negocio. Recuerde que cada situación es única, por lo que es esencial adaptar estas estrategias a las circunstancias específicas de su empresa agrícola.

La consulta a expertos en agronegocios y gestión financiera para evaluar opciones y desarrollar estrategias específicas para tu situación va a ser beneficiosa para tomar mejores decisiones.

Explorar alianzas estratégicas con otras empresas del sector agrícola. Esto podría incluir acuerdos de colaboración en la producción, distribución y/o comercialización que van a acelerar el crecimiento de su empresa.

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